La pancreatitis es, a grandes rasgos, una inflamación del páncreas.
La pancreatitis se da cuando las enzimas pancreáticas, que procesan la comida, se activan en el páncreas en lugar de hacerlo en el intestino delgado. La inflamación puede ser repentina (aguda) o progresiva (crónica).
Inflamación del páncreas
TIPOS
Existen dos tipos de pancreatitis: la aguda y la crónica.
Esta enfermedad se califica de aguda, cuando se presenta como un ataque momentáneo tras el cual el páncreas vuelve a su estado normal. Un ataque de páncreas agudo puede ser de gravedad.
En cambio, la consideramos crónica cuando consiste en una disfunción continua del páncreas, que conlleva una fibrosis asociada.
Imagen de una pancreatitis aguda
CAUSAS
Las causas más comunes son:
- la existencia de cálculos biliares
- la ingesta excesiva y continuada de alcohol
- llevar una alimentación rica en grasas
Esta enfermedad se puede desarrollar como efecto secundario de otros agentes infecciosos como virus, bacterias, hongos y parásitos, entre los que cabe destacar las hepatitis, la legionella, salmonella o el toxoplasma.
Las causas más comunes de esta enfermedad
SÍNTOMAS
Los síntomas más comunes son:
- Dolor abdominal
- Náuseas
- Vómitos
Se puede dar también una bajada de peso considerable, indigestión, ictericia y heces anormales.
Dolor abdominal es el síntoma más representativo
DIAGNÓSTICO
El primer paso a dar es un examen físico y la realización de la historia médica sobre la que trabajar.
Seguidamente, hay una serie de pruebas que ayudan a diagnosticar que se trata de una inflamación del páncreas como son:
el análisis de sangre para comprobar si las enzimas han aumentado, la radiografía, el TAC, la ecografía y la endoscopia.
TRATAMIENTO
Una vez se ha realizado el diagnóstico, pasamos a cómo tratar la afección.
- Si se trata de una pancreatitis aguda, lo normal es que esta se resuelva sola, ya que se trata de una inflamación puntual.
Igualmente, se debe vaciar el estómago mediante una sonda y seguir un ayuno estricto. De esta forma, controlamos la producción excesiva de enzimas.
Para sustituir los alimentos, se necesitará administrar suero con el que equilibrar la pérdida de minerales y sales.
El dolor agudo que se sufre se trata con analgésicos.
- Si se trata de una inflamación crónica, los analgésicos serán imprescindibles para calmar los dolores agudos que acarrean.
Se ha de seguir una dieta estricta baja en grasas e hidratos de carbono. No se podrá volver a consumir alcohol nunca.
En estos casos, la cirugía es el recurso necesario en la mayoría de los casos.
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