En nuestro anterior post os hablamos de las hernias más comunes en el área clínica en la que Iocir es especialista. Hemos decidido dedicar un artículo completo a la hernia de hiato, porque aparte de ser una hernia bastante común, conlleva unos cambios posturales y alimenticios que pueden ayudar a rebajar los molestos síntomas que presentan este tipo de hernias.
Qué es la hernia de hiato?
La hernia de hiato consiste en que una parte del estómago sobresale hacia el tórax a través de un orificio en el diafragma. Esta protusión puede ser causada por tos crónica, estreñimiento, envejecimiento, obesidad, levantamiento de objetos muy pesados, tabaquismo o estrés.
Explicación gráfica de una hernia de hiato
Normalmente esta hernia se da en pacientes mayores de 50 años, aunque puede suceder en personas de otras edades. La hernia de hiato se puede tratar con fármacos en una primera fase. Por supuesto, es recomendable en estos pacientes un cambio en sus hábitos de vida (dejar de fumar, llevar una dieta saludable, etc.).
Posturas recomendables
La hernia de hiato generalmente conlleva acidez, reflujo, dolor abdominal. Para intentar mejorar estas molestias hay cambios posturales que pueden ayudar al paciente a sobrellevar dichas molestias, como son los siguientes:
- Dormir incorporado. Este simple gesto ayuda a reducir los reflujos gástricos.
- No tumbarse hasta un par de horas después de una comida. La digestión en esta postura favorece el reflujo.
- Agacharse doblando las rodillas, no flexionando el tronco para evitar una presión abdominal.
- No realizar ejercicio físico intenso, aunque sí está recomendado hacer alguna actividad física diaria idealmente tras comer, lo cual ayudar a bajar peso también en caso de sobrepeso.
Cómo debemos agacharnos y cómo no es recomendable hacerlo
Consejos dietéticos contra la hernia de hiato
- Como comentábamos anteriormente, bajar de peso en caso de que haya soprepeso en el paciente es muy importante dado que se aligera la presión del abdomen mejorando así los síntomas.
- Evitar las comidas copiosas. A más comida, digestiones más lentas, que harán al paciente más propenso a sufrir reflujo. Se recomiendan 5 comidas ligeras al día, comer de forma pausada y masticando bien los alimentos.
- No comer nada, aunque sea líquido, justo antes de irse a dormir. Lo ideal es cenar 2 a 3 horas antes de ir a la cama para dar tiempo a la digestión a hacer su trabajo.
- Cocinar con técnicas saludables para el organismo como hervir, al vapor, o al horno. Evitar los fritos o rebozados y tener cuidado de no quemar el alimento cuando se hace a la plancha porque entonces de sano, pasa a irritante para nuestro estómago.
- Evitar los alimentos a temperaturas extremas (muy calientes o muy fríos), ya que esto puede favorecer la irritación del estómago.
Cocina al vapor, una opción sana de cocinar
ALIMENTOS A EVITAR
- Se deben reducir o eliminar los alimentos muy grasos y picantes, así como los que están en escabeche o en salazón.
- También debemos eliminar o reducir al máximo ciertas bebidas estimulantes como el alcohol, las bebidas carbonatadas, el té o el café.
- Se deben limitar los alimentos ácidos sobre todo a la hora de la cena. Así, a muchas personas que padecen hernia de hiato les sientan mal productos como el tomate, el vinagre, los cítricos, las frutas no maduras o, en algunos casos aunque menos frecuentes, incluso el yogur.
- Ciertos alimentos o condimentos como el ajo, la cebolla o el pimiento (sobre todo crudos) también favorecen las molestias en personas con hernia de hiato. En estos casos, haced uso del sentido común. Si veis que os afecta, disminuid o eliminad su uso de vuestra dieta.
Acostumbrémonos a seguir una dieta saludable
ALIMENTOS RECOMENDADOS
Os recomendamos que hagáis siempre uso del sentido común y de vuestra experiencia sobre cómo digerís cada alimento. Es importante escuchar a vuestro organismo y entender cómo responde este ante ciertos alimentos, evitando los que nos irritan. Aquí os dejamos algunos consejos generales con respecto a la alimentación saludable:
- Consumir lácteos desnatados en lugar de enteros para reducir la ingesta de grasa saturada.
- Si el yogur os irrita, sustituirlo por queso fresco para no eliminar los lácteos totalmente de vuestra dieta.
- Elegir carnes poco grasas como el pavo o el pollo y pescados blancos, aunque, se puede consumir pescado azul de forma moderada y estar atentos de cómo reacciona nuestro organismo.
- Beber líquido en abundancia para estar bien hidratados como el agua, las infusiones de hierbas, caldos o zumos naturales no ácidos.
- En cuanto a las frutas es preferible tomar las frutas maduras, al horno o en compota, ya que en estos casos disminuyen su acidez.
- Las verduras y cereales no suelen generen molestias pero debéis evitar algunas verduras flatulentas como la coliflor, las alcachofas o las coles de Bruselas. Respecto a los cereales, evitar los que contengan chocolate o sean muy azucarados.
- Por último, se aconseja utilizar aceite de oliva virgen para cocinar y evitar la mantequilla. Lo ideal es comer sin salsas, aunque alguna vez se pueden usar salsas ligeras como una mayonesa casera.
Compota de fruta, una forma de comer fruta sin acidez
Como siempre os decimos, haciendo unos cambios en nuestra vida podemos mejorar nuestra salud en gran medida. Esperamos que estos consejos y la dieta recomendable para aliviar los reflujos os sean de gran ayuda.