El esófago de Barret es una enfermedad adquirida que se presenta en el revestimiento del esófago, presentando daño a causa del ácido gástrico.
La prevalencia de esta enfermedad ha aumentado severamente en los últimos años, según un estudio de la Revista Española de Enfermedades Digestivas.
El esófago de Barret es una enfermedad que se da después de haber tenido reflujo gastroesofágico.
Uno de los riesgos de padecer esta enfermedad es contraer cáncer en el área afectada, sin embargo, no es lo más común.
Causas y síntomas del esófago de Barret
Quienes presentan esta enfermedad con mayor frecuencia son los adultos de sexo masculino y una posible causa es el consumo de alcohol.
Sufrir de reflujo gastroesofágico es otra de las causas. Un estudio revela que, en Europa, el 10% de la población tiene síntomas de reflujo al menos una vez a la semana y un 20% de forma más ocasional.
La enfermedad del esófago de Barret no tiene síntomas notables, por lo tanto, la mayoría de los casos se detectan tardíamente.
Algunos de los factores de riesgo para desarrollar esta enfermedad son: genéticos, edad avanzada, sexo masculino, obesidad, consumo de tabaco y alcohol.
En caso de sentir reflujo ácido con frecuencia, entonces la persona deberá acudir al especialista para realizarse una endoscopia, esto será clave en el diagnóstico. Si el paciente tiene esófago de Barret, deberá realizarse una endoscopia cada 3 a 5 años o más si encuentran células anormales.
Tratamiento para el esófago de Barret
Para tratar el esófago de Barret es necesario realizar una biopsia endoscópica y, en caso de tener células cancerígenas, el especialista deberá recomendar una cirugía para el tratamiento.
Es importante saber que se deben ejecutar técnicas de extirpación del tejido dañino, por ejemplo:
- La terapia fotodinámica (TFD) implica el uso de un dispositivo especial de láser, llamado globo esofágico, junto con un medicamento llamado Photofrin.
- Otros procedimientos utilizan diferentes tipos de alta energía para destruir el tejido precanceroso.
- Cirugía para extirpar el revestimiento anormal.
Tras la realización de estos tratamientos el esófago de Barret mejorará.
Recuerda que si tienes acidez, reflujo, pérdida de peso o problemas para deglutir, estos son síntomas claros de la enfermedad de esófago de Barret, así que no dudes en contactar con los cirujanos en Huelva de IOCir cuando esto suceda.