La ciática no es una patología en sí misma, sino una manifestación dolorosa que se produce a lo largo del recorrido del nervio ciático.
Habitualmente, el dolor nace en la nalga, se extiende por la parte de atrás o externa de la pierna y puede, incluso, alcanzar la zona del pie.
Es muy importante distinguir la ciática de otros dolores, ya que podría confundirse con otras molestias, osteoarticulares o musculares, en la misma zona.
Causas de la ciática
Las causas de la ciática pueden ser diversas. El dolor se produce por la irritación del nervio ciático o de su raíz. Esa irritación puede producirse por:
- Traumatismo
- Contractura
- Inflamación
- Artrosis
- Tumor medular o en la meninge
- Lesión vertebral
- Deformidades óseas
- Hernia de disco
A pesar de esto, el motivo más común es la compresión de la raíz del nervio ciático dentro del canal raquídeo, debido a una hernia del disco intervertebral.
La raíz que origina el nervio ciático pasa por un espacio estrecho entre el disco intervertebral y una articulación llamada facetaria. Cuando se produce una hernia de disco, se da una protrusión del disco justo donde pasa el nervio, el espacio de paso disminuye y podría llegar a oprimir la raíz.
Ciática y Hernia de disco
La hernia de disco se produce cuando las capas externas de los discos intervertebrales se deterioran. Si este deterioro permite el desplazamiento de alguna parte interior del disco, ésta podría pinzar los nervios del interior de la columna. Es entonces cuando se dice que existe una hernia. Las hernias discales más comunes son las de la parte lumbar, es decir, en la parte baja de la espalda.
Los discos intervertebrales son unas piezas más blandas que los huesos, que actúan como amortiguador. Con la edad, los discos se van volviendo más planos y pierden parte de su capacidad elástica. Entre los 30 y los 40 años el riesgo de sufrir una hernia de disco aumenta considerablemente.
Síntomas y diagnóstico de la ciática por hernia de disco
Cuando se produce una hernia discal, con la presión sobre el nervio, se produce el dolor, que se extiende a las piernas. A más presión, más sensación de dolor. Si el nervio comprimido es el ciático, el dolor se irradia por la nalga, la pierna y puede llegar al pie.
Este dolor puede ir acompañado de otros síntomas que tienen que ver con la sensibilidad nerviosa. Éstos pueden ser cosquilleo, sensación de acorchamiento. También pueden experimentarse problemas en la actividad motora, como entumecimiento y debilidad muscular.
El dolor empeora con la actividad física y mejora con el descanso. Cualquier actividad que aumente la compresión del nervio aumentará el dolor. Toser, conducir o, simplemente, pasar mucho tiempo sentado, son actividades que harán que aumente el dolor.
Además del dolor, otro síntoma de la hernia discal es la contractura muscular. El dolor hace que se produzca rigidez en la musculatura lumbar, en ocasiones, muy aguda.
El especialista también realizará exámenes para ver si existe escoliosis lumbar, paresia en los músculos afectados, hipoestesia en la piel de la zona afectada y disminución en los reflejos.
Tratamiento quirúrgico de la ciática por hernia discal
El tratamiento quirúrgico de la ciática por hernia de disco, consiste en liberar la raíz nerviosa comprimida. Además, es aconsejable resecar todo el núcleo pulposo, a fin de evitar la reincidencia tras la operación.
La intervención quirúrgica se puede realizar de forma tradicional o bien mediante microcirugía. Mediante esta última técnica, se disminuyen tanto el traumatismo como la pérdida de sangre y el postoperatorio. Es decir, tanto el tiempo de hospitalización como la convalecencia serán inferiores en comparación con la cirugía convencional.
Los procedimientos que se utilizan para la cirugía de la hernia discal son:
- Laminectomía: es un procedimiento previo a la microdisectomia, mediante el cual se elimina un pequeño fragmento de hueso de la vértebra afectada. Así el cirujano podrá visualizar mejor la hernia discal.
- Microdisectomía: mediante esta técnica se remueven los trozos del disco herniado. Para ello se usa un microscopio para ver tanto el disco como los nervios. Así el cirujano puede realizar una incisión más pequeña y causar menos daños en el tejido que rodea el disco.
Si estás sufriendo ciática, lo mejor es que acudas a tu médico para que te diagnostique el origen del dolor y establezca el tratamiento más adecuado. Si resides en la zona de Huelva o alrededores, tus cirujanos están en IOCir. Nos encontrarás en la calle Punta Umbría número 8, 21002, Huelva. Puedes contactar en el teléfono 959 24 21 00 o haciendo click aquí. También puedes solicitar cita online directamente. No lo dudes, tu salud es lo más importante.